En España existen alrededor de 54 millones de líneas móviles (lo que equivale al 117% de la población). Es decir, existe más de un teléfono móvil por persona(1).
Hoy en día es más que habitual ver a profesionales de la salud consultando sus teléfonos móviles durante su jornada laboral, peroooo ¿Los utilizamos bien? Allá van los 5 mandamientos para sacar el máximo partido a esta herramienta.
Iban a ser 10 mandamientos pero se han quedado en 5 por problemas técnicos con las tablas… ?
1. Te lavarás las manos sobre todas las cosas
El lavado de manos se ha evidenciado a lo largo de los años como una de las medidas más sencillas, más baratas y más eficaces a la hora de prevenir las infecciones nosocomiales. Esta práctica es más que habitual en nuestra rutina diaria y, por supuestísimo, te debes lavar las manos antes y después de manejar el teléfono móvil(2).
El teléfono móvil se ha evidenciado como una gran herramienta. De hecho, hoy en día lo utilizamos para casi todo, menos para hablar por teléfono. GPS, pronóstico del tiempo, navegar por internet, etc… son algunas de las múltiples utilidades que le damos a lo largo del día. Pero se ha demostrado que puede ser un gran distractor a la hora de desarrollar nuestro trabajo (3). Por esto es importante:
Desactivar las notificaciones durante la jornada laboral.
Quitar el volumen.
Si es necesario, podemos activar el modo avión.
No consultar el teléfono móvilcuando estemos preparando medicación, escribiendo un tratamiento, pasando visita o en la habitación del paciente, o cualquier otra situación que precise de la máxima concentración.
Tal vez habría que plantear crear zonas libres de móviles dentro de la unidad en las que esté prohibido utilizar estos para evitar distracciones.
Evita que el teléfono móvil te distraiga de lo realmente importante.
3. Desinfectarás el teléfono móvil
¿Alguna vez le has pasado un pañito con desinfectante a tu smartphone? Pues deberías. Estas son algunas de las bacterias y hongos que pululan en nuestros teléfonos…
Una publicación compartida de Pau Matalap (@paumatalap) el
Es importante que antes de utilizar un producto para la desinfección, te asegures que éste no va a dañar los materiales de tu smartphone.
4. No robarás (el cargador de tu compañera)
Ha llegado un momento en que todo el mundo va desesperado buscando un enchufe al que conectar su cargador. Desgraciadamente, las baterías de hoy en día no duran tanto como quisiéramos. Asegúrate de llevar tu propio cargador (y de desinfectarlo de vez en cuando al igual que el móvil).
También es importante dejar el móvil cargando en una zona segura, alejado de los “amigos de lo ajeno” fuera de cualquier zona “libre de móvil”.
Deja el móvil cargando en un lugar seguro en el que, si lo consultas, no te pueda distraer (por ejemplo en la salita del personal).
5. Honrarás las Apps que te faciliten el trabajo
Hoy en día hay innumerables Apps que nos pueden facilitar el trabajo tanto a médicos, enfermeras, como a los propios pacientes. Es importante conocer alguna de ellas y sobre todo, saber dónde podemos encontrar Apps de confianza.
Dos buenos repositorios en este sentido son el de la Fundación ISYS y el de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía. En ellos podrás encontrar tanto Apps para profesionales como para pacientes.
Puedes acceder a ellos haciendo click en la imagen.
2. Vermeil T, Peters A, Kilpatrick C, Pires D, Allegranzi B, Pittet D. Hand hygiene in hospitals: anatomy of a revolution. Journal of Hospital Infection. 1 de abril de 2019;101(4):383-92.
3. Cho S, Lee E. Distraction by smartphone use during clinical practice and opinions about smartphone restriction policies: A cross-sectional descriptive study of nursing students. Nurse Education Today. mayo de 2016;40:128-33.
Instagram está de moda. Fotos en la playa, vídeos de las vacaciones y stories inundan las pantallas de nuestros teléfonos móviles, el postureo está de moda, pero cuando somos profesionales de la sanidad la cosa cambia…
La RAE recoge el término “postureo” como: “Actitud artificiosa e impostada que se adopta por conveniencia o presunción”. Y parece que esta actitud es la tónica dominante últimamente en las Redes Sociales.
Éste es un tema al que últimamente le estoy dando muchas vueltas y un tuit de Esther Gorjón (@jesterhanny) fue la chispa que encendió la mecha de este post…
Postureo: “Actitud artificiosa e impostada que se adopta por conveniencia o presunción”
RAE
Hay una línea bastante gruesa entre la visibilidad enfermera y apuntarse a todo lo que sale para hacer postureo y ganar visibilidad. Repito.. MUY GRUESA. Entre eso, las publis de cursos, los taper de comida y demás.. estamos perdiendo el norte…
El postureo existe en todas las Redes Sociales. Todos (o casi todos) tenemos unas vidas fantásticas, realizamos viajes de ensueño (que narramos casi al minuto) y somos “superbuenos” profesionales. Como diría el amigo Néstor (@Iruxol78) “me gustaría verlos por un agujerito a ver cómo trabajan en su día a día“.
Pero es en Instagram en la que el postureo se dispara hasta cotas insospechadas. Anuncios de comida preparada, sorteos de cursos, de tazas y demás merchandising kuki enfermeril. Que, oye, cada uno hace con su vida lo que le viene en gana y es muy lícito (faltaría más). El problema viene cuando el postureo se realiza con el uniforme del trabajo, en el hospital y en horario laboral.
Las repercusiones legales del «postureo» en horario laboral siempre van a depender del caso concreto, de las circunstancias, del contexto, del mensaje, etc estos elementos hay que tenerlos muy en cuenta a la hora de determinar si hay una posible sanción (el régimen disciplinario es similar al penal en cuanto a las garantías para el denunciado).
Chema Antequera
Vistas la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias y la Ley del Estatuto Marco, el postureo podría vulnerar:
1️⃣ El tiempo del postureo no es tiempo efectivo de disposición al centro y a la atención del paciente.
2️⃣ El postureo puede suponer un incumplimiento ético hacia la organización, y los pacientes pues puede romper el principio de confianza y responsabilidad en la atención.
3️⃣ El postureo puede suponer una vulneración de la intimidad espacial/unidad al divulgar imágenes de espacios privados sin autorización del centro.
4️⃣ Desde el plano de la seguridad del paciente igualmente, pues esos tiempos supone no atención sanitaria, una irresponsable disrupción de la necesaria atención a los pacientes.
5️⃣ Puede ser una falta muy grave por incumplimiento notorio de sus funciones. En este caso según la gravedad puede suponer la pérdida de la condición de personal estatutario, y durante los siguientes 6 años no puede opositar ni estar en bolsas contratación.
6️⃣ Y bueno, si hay pacientes inconscientes en el postureo por ejemplo, o algo que suelo ver mucho (fotos de las HC) es un grave delito de revelación o descubrimiento de secretos.
Recientemente Chema dejó plasmado esto en un hilo de Twitter para enmarcar.
??CONSEJOS JURÍDICOS PARA QUE LAS #ENFERMERAS CONTRATADAS SOBREVIVAN AL #VERANO Mucha suerte. No seas temeraria, si dudas, pregunta. y todo siempre escrito. pic.twitter.com/uwfl9ukdtI
— AbogadoDeEnfermeras (@abogadoenferme) July 1, 2019
Recuerda que no pasa nada…hasta que pasa, así que más vale prevenir que curar y si este verano te apetece una buena sesión de postureo, que sea en chanclas y en la playa, no vaya a ser que te busques un buen lío.
Y por aquello del feedback, gracias al gran Miguel Ángel Sáez (@masaezmartinez) acabamos este post con música al estilo Máñez (@manyez) y es que esta canción le viene “pintiparada”.
Las enfermeras siempre estamos dispuestas a reparar cualquier artilugio con un trozo de esparadrapo cual McGuyver o a sacar la tijeras más rápido que Lucky Luck. ¿Cuántas veces has cortado un parche de medicación? has consultado primero si se puede o no se puede cortar? Hoy, Xelo nos aclarará todo esto. Veamos qué nos cuenta…
Pues parece que el 2018 se acaba y es tiempo de reflexionar. Como si de “Salud Con Cosas” se tratara vamos a tratar de resumir algunos acontecimientos que han marcado este año que termina…
Se acerca la nochevieja y por estas fechas siempre nos da por reflexionar sobre lo que hemos hecho y lo que queda por hacer, como si la vida no pasara segundo a segundo…
Este año, nos tocará despedirlo con una “Nochevieja de hospital“, eso sí, rodeado de compañeros de 10 y en un ambiente laboral que más bien pareciera familiar.
2018 ha estado lleno de buenos momentos, momentos regulares y mucho aprendizaje (en todos los sentidos). Este fue el año en que me decidí a saltar la nevera, no una si no varias veces. En alguna ocasión la salvé sin problemas y en otras el guarrazo fue de órdago. Huelga decir que he aprendido más con cada golpe que con los saltos limpios. Nadie que no se haya raspado las rodillas ha aprendido bien a ir en bici…
Ha sido un año de muchas ponencias. Quién me lo iba a decir a mí, cuando me tocaba exponer un trabajo y entraba en pánico, que algún día estaría frente a 300 personas en Albacete en la Jornadas del Día de la Enfermería (que desde ese día me ha robado el corazón).
Muchos proyectos, mucho estrés y poco tiempo. Tiempo que, en demasiadas ocasiones, he tenido que robar a familiares y amigos. Tiempo que no se recupera. Vayan estas líneas para agradecer a mi mujer todo lo que ha aguantado y, espero, le queda por aguantar. Si dicen que detrás de un gran hombre, siempre hay una gran mujer, en mi caso, detrás de un hombre del montón hay una mujer extraordinaría. Ella, sin duda, ha sido la que más ha sufrido este “robo de tiempo”.
Si has llegado leyendo hasta aquí tal vez pienses que 2018 ha sido un mal año, pero no es así. Lo de “que te peten” es porque yo siempre tengo la costumbre de mirar más hacia delante que hacia detrás. Quién se pasa la vida mirando atrás no ve las piedras del camino.
Y como si del mensaje del Rey se tratara, no quisiera acabar estas lineas sin agradecerte que estés ahí, al otro lado de la pantalla, leyendo, aportando, compartiendo y, en definitiva, haciendo cada vez más grande y más fuerte esta red que hace que todos crezcamos, como profesionales y como personas. Gracias.
Así que, si el 2018 ha sido cojonudo, esperemos que 2019 lo sea mucho más y que en nochevieja del año que viene podamos decir “2019 que te peten”.
Como reza el famoso anuncio de unos grandes almacenes “Llega la Navidad, un año más, y alguien con su trabajo la va a hacer funcionar” y no, no me estoy refiriendo al papa Elfo…
Hace dos años ya contábamos cómo es pasar una Nochevieja en el hospitaly es que éstas no son fechas para estar en él.
Como cada año, miles de personas estarán al pie del cañón, velando por la salud de los demás. Vaya desde aquí este pequeño homenaje en forma de vídeo.
¿Ayudas a que llegue este homenaje compartiendo la publicación? Muchas gracias